Las relaciones de pareja se basan en el amor recíproco con el debido respeto y fidelidad entre sí. La confianza y la comunicación son los pilares fundamentales de toda relación sentimental, y su déficit, puede generar estados involutivos en la relación, como los celos, la ansiedad, la obsesión, son algunos ejemplos. En los supuestos de la pérdida de la confianza, toma importancia la figura del detective para casos de infidelidad. Es la persona legal e idónea como testimonio visual de las actividades observadas. Además, su informe es habitual acompañarlo con reportaje de fotos y videos.

Características generales

La infidelidad supone traición y engaño a la pareja y es uno de los motivos más frecuentes para la contratación de detectives. Ésta puede ser «conyugal» , si se trata de un matrimonio, o «sentimental» en los supuestos de noviazgo o pareja de hecho. El mundillo de la infidelidad es toda una «ciencia» , ya que existen tantos tipos de infidelidades como infieles. Desde nuestra experiencia podemos hacer tres grandes grupos para clasificar a las personas infieles. En primer lugar, los del tipo circunstancial, que son aquellos que no buscan la infidelidad de forma activa, pero se entregan a la experiencia sin valorar las consecuencias. Otros, son los del tipo esporádico, que tienen una inclinación hacia lo erótico más pronunciada y por último, los innatos, que sienten como necesidad llevar una doble vida.

Efectos: negativos y positivos

Son muchos los efectos negativos que puede experimentar la víctima por infidelidad como la desolación, la inseguridad y la baja autoestima. Pero, con ayuda, se llegan a conseguir grandes beneficios que superan por mucho, el vivir una relación tóxica y afectada por infidelidades, cualquiera que sea su tipo.

Si tienes cualquier tipo de sospechas, la contratación de un servicio especializado por detective para casos de infidelidad es lo más recomendado. Te servirá de gran ayuda para conocer si existe infidelidad en tu relación, o si por el contrario, ésta no existe. A menudo son otros problemas de menor importancia, los que se detectan en las relaciones de pareja.